DANIEL VELASCO (Enviado P2M, Super Bowl LVII)
PHOENIX, Arizona, 7 de febrero de 2023.- Phoenix y sus alrededores, pero principalmente Glendale, en Arizona, se visten de gala para ser testigos de un evento sin igual en el que el deporte tecnología y espectáculo se fusionan en una forma extraordinaria, el Super Bowl.
Todo comienza con una presentación digna de cualquier evento de Hollywood, en la que los protagonistas son mostrados como verdaderos gladiadores que escenificarán una épica batalla la cual será atestiguada por millones de personas en el mundo y cuyo ganador tendrá asegurado un lugar en el olimpo del ovoide profesional.
Los ídolos son acechados por los intermediarios que brindamos una perspectiva diferente de cada uno de ellos a sus admiradores, quienes con vítores y cánticos de MVP pretenden dar ese último impulso para que sus equipos sean capaces de alcanzar la victoria. Y entre todo el mar de historias posibles para esta cita, destaca la de Jason y Travis Kelce, dos hermanos reclutados por el mismo coach, pero destinados a enfrentarse por la gloria deportiva.
Como todos los gladiadores, los equipos requieren de un escenario imponente que sea digno de la lucha que está por iniciar. El recinto elegido, se encuentra en medio de un desierto que, como si aguardara esta justa, ha decidido dejar de lado el calor inmisericorde que lo caracteriza, y en cambio, brindar temperaturas que permiten la potencialización de las habilidades de los jugadores.
Así, el State Farm Stadium ha transformado su imponente estructura para vestir sus mejores galas para recibir a los dos mejores conjuntos de la temporada. Por fuera, el estadio destaca desde la distancia, con imágenes de los equipos y los jugadores que este próximo domingo disputarán el trofeo Vince Lombardi. Por dentro, el pasto, híbrido para esta ocasión, y cuya preparación ha requerido más de un mes, es bañado con la suficiente dosis de luz para mantenerlo en óptimas condiciones.
La tradición que inició a mediados de los años sesenta, hoy es cubierta por más de 70 medios de comunicación tan sólo de los Estados Unidos. Tal es el alcance de este evento que acapara la atención incluso del público que no es amante del deporte de las tackleadas. Probablemente, alguien cercano a ti ni si quiera se interesa por la parte deportiva, pero esperará atentamente a ver si el medio tiempo, protagonizado por Rihanna, es capaz de superar lo hecho por Katy Perry, Michael Jackson, U2 o Paul McCartney.
¡Luces! ¡Cámara! ¡Acción! Sin duda son las voces apropiadas para acompañar desde cualquier punto en el que te encuentres, esta batalla épica que pronto se convertirá en un clásico más en los archivos de NFL Films y de tu memoria deportiva.